Ambito Financiero, Noviembre 22 de 2000
Los dos economistas que más criticaron a este gobierno, también festejaron el acuerdo con las provincias Los dos principales críticos a la gestión económica del gobierno de Fernando de la Rúa, los economistas Guillermo Calvo de la Universidad de Maryland, y Carlos Rodríguez del CEMA, sorprendieron ayer al festejar el acuerdo fiscal alcanzado el lunes entre la Nación y las provincias. "Las tres reformas lanzadas, de obras sociales, de jubilaciones y el acuerdo federal es tarea de un gobierno de 6 años", dijo ayer Carlos Rodríguez, a quien el ministro José Luis Machinea calificó de "conspirador" por sus críticas sucesivas a las medidas implementadas desde que asumió la Alianza. Desde Estados Unidos, Guillermo Calvo no se quedó atrás: "el acuerdo es muy importante y demuestra que la Argentina tiene la madurez para enfrentar los problemas", aseguró Calvo. Los dos analista coincidieron en que la Argentina deberá vender estas medidas a los inversores y demostrar credibilidad para que el país vuelva a crecer.
La batalla ahora es contra los sindicatos. Lo único que tienen que hacer el gobierno es ratificar el rumbo. Quien fuera uno de los críticos acérrimos de la gestión económica de De la Rúa, Carlos Rodríguez, por primera vez se muestra a favor. Las tres reformas lanzadas, de obras sociales, de jubilaciones y el acuerdo federal es tarea de un gobierno de 6 años, dijo el ex viceministro de Economía.
Todas las medidas anunciadas desde que asumió Machinea en el Palacio de Hacienda fueron duramente objetadas por Rodríguez, desde el impuestazo, la rebaja salarial o la reducción de impuesto a los intereses. Tanto que Machinea lo calificó de conspirador. Igual Rodríguez marcó algunas advertencias: tienen que vender bien a inversores las medidas. Y que olvidarse de mencionar la herencia recibida y las políticas activas.
Este fue el diálogo mantenido con el titular de la Universidad del CEMA:
Periodista: ¿Qué le pareció el acuerdo?
Carlos Rodríguez: Creo que en este momento el gobierno, presionado por los mercados y por la cuerda tensada, tiene tres medidas fundamentales: lo más importante es que se haga la reglamentación satisfactoria del decreto de desregulación de obras sociales, luego la reforma previsional y por último el acuerdo con gobernadores. Pero de este acuerdo, un aspecto en particular es el congelamiento del gasto primario, que es una pro-mesa. No me llama la atención pero sí es muy importante el techo a la coparticipación de 1.364 millones de dólares en 2001 y 2002. Para mí, es una realidad y eso es histórico. Se trató de hacer a lo largo del gobierno de Menem y nunca se pudo. Que los gobernadores acepten un techo a la coparticipación por 3 años es un even-to de importancia enorme para la estabilidad del país. Si se lograra crecer en 2001 y 2002, el 100% de la recaudación marginal va a la Nación para bajar el déficit. Es muy positivo.
P: Pero igual, para el año próximo aumentaron el déficit previsto...
C.R.: Porque calcularon que no van a crecer. Si esas tres medidas son vendidas y mostradas a inversores con credibilidad en el sistema creo que tendría que volver la confianza. Queda por hacer la reducción de los impuestos al trabajo... La próxima mala noticia es el desempleo alto, es en diciembre cuando los sindicatos planean frenar la desregulación de obras sociales. El gobierno tiene que ser apoyado y
merece ser apoyado frente a los sindicatos en esta batalla.
P: ¿Piensa que puede dar marcha atrás con la desregulación de obras sociales?
C.R.: No sé, pero el problema hoy son los sindicatos. El 2 de enero (después de la desregulación) nos preocupamos de otras cosas. Tenemos que estar contentos de que se consoliden esas tres medidas: obras sociales, reforma de jubilaciones y acuerdo con gobernadores.
P: ¿Qué opina de la rebaja de las perspectivas de Moody's?
C.R.: A la rebaja de Moody's no hay que darle más atención que a la que se le prestó a Standard and Poors. No es ninguna novedad.
Crecimiento
P: ¿Cambian sus expectativas de crecimiento del PBI para 2001 ahora con este acuerdo?
C.R.: La teníamos en cero. Estas tres medidas muestran que hay luz al final del túnel. Dependerá de si alcanzan a convencer a los inversores, en esto estará la estrategia y capacidad de venta del equipo económico. No fueron buenos vendedores hasta ahora, pero las acciones la tomaron.
Desde la caída de Carlos Alvarez, el gobierno se movió en la dirección correcta. Alfonsín está invisible. Lamentablemente, para que hagan cosas buenas la cuerda tiene que estar tensada mucho tiempo. Para cambiar las cifras, esperaría una semana más para ver cómo el gobierno defiende esta medida frente a
sindicatos. Deben darse cuenta de que no hay conspiradores internos, más que en los sindicatos. Lo único que tienen que hacer es ratificar el rumbo, en el cual los apoyo. Las tres reformas que han planteado son la tarea de un gobierno de 6 años. En el proceso de vender las reformas, que se olviden de la herencia recibida y de las políticas activas.
Fueron cosas que los distrajeron en el año de la consolidación de una economía de mercado. De hecho, si la situación mejora, muchos piensan que volverán a los temas de ellos, contra los supermercados, contra las empresas grandes, por el compre argentino, etc.