Cree que Reutemann y De la Sota representan una corriente "promercado" que es la que tiene futuro.

El economista y ex viceministro de Economía Carlos Rodríguez sostuvo que la única alternativa ante la inevitable crisis de gobernabilidad de la Alianza es un PJ "promercado" que no descuide la problemática social.

-La probabilidad se acrecienta día a día, la prima de riesgo país está por encima de los 1.000 puntos y el Gobierno ya no tiene más medidas para anunciar. Básicamente está diciendo esperemos, y a qué? a las elecciones de octubre. ¿Y qué va a pasar? Van a ser derrotados por un voto castigo que va a caer sobre la oposición.

-Sí, pero aquí surge otro problema, la oposición como tal no tiene un proyecto porque aún no definió sus internas. Entonces, en octubre vamos a tener un problema doble: ideas derrotadas y triunfadores sin propuestas que van a generar una situación confusa.

-Yo veo en el peronismo dos líneas: una que está evolucionando hacía algo similar al partido republicano norteamericano, es decir, liberal, capitalista y promercado. Y otra línea que continúa en el viejo partido populista, demagógico y apoyado en un sindicalismo negociador. Este último es el peronismo convencional que nunca triunfó en el manejo de la economía, y está representado por Eduardo Duhalde.

-Me desconciertan las cosas que dice, porque no están bien para un modelo al que interpreto como capitalista, que permita el crecimiento y la redistribución del ingreso a través de un gasto social eficiente. Carlos Reutemann y José Manuel de la Sota estarían en la línea que yo interpreto de peronismo con futuro. Pero no tienen poder.

-Yo creo que nada. A De la Rúa no le veo futuro y Cavallo como político es un hombre conflictivo. Es el bombero que la sociedad usa para apagar incendios, y él se cree que eso le da poder político pero está confundido.

-Yo me concentraría en el peronismo, pero primero debe definir su ideología y su mensaje. La Alianza representa el resentimiento y la conspiración, esa clase media urbana que vive pensando en que alguien va a robarle lo poco que tiene. En cambio el pueblo peronista es optimista, no odia a su patrón, ni busca expropiar la fábrica, sólo quiere trabajo y crecer.

Carlos Rodríguez propone una reducción del gasto público a través de una disminución de cargos políticos. Para ello "se debería implementar un sistema legislativo unicameral, con no más de 30 legisladores", aseguró justificándolo con que "las leyes se votan con tres manos que son las de los jefes de bancadas".

En cuanto a la cantidad de secretarías y funcionarios, Rodríguez consideró que "el gasto hay que reducirlo y reasignarlo, como por ejemplo en las áreas de salud, seguridad y justicia, donde se debe aumentar el gasto y reducir los ñoquis".

En tanto, al ser consultado sobre el financiamiento de los partidos políticos respondió que "no soy tan fanático de esa medida". Y agregó: "Las contribuciones a los partidos deberían ser abiertas, legales y no generar cadenas de favores. Si funciona así no veo grandes problemas". Sin embargo, reconoció que "hecha la ley, hecha la trampa; por eso la política debe ser abierta y transparente, donde no haya políticos con tanto poder que valga la pena financiarlos".