Entre nuestros gráficos favoritos figura el del tipo real de cambio (TRC). Esta variable mide el poder de compra del dólar americano en el mercado interno. Puede ser vista como la inversa del salario real local: a mayor TRC, menor salario real.
Hay muchas definiciones del TRC. La más aceptada es igual al producto del tipo de cambio (en el mercado libre cuando hay control de cambios) y el índice de precios mayoristas de EEUU, dividido por el índice local de precios al consumidor. O sea que el TRC mide el precio de los bienes transables (manufacturas y commodities) en términos de los no transables (servicios privados y públicos).
Los picos del TRC están asociados a grandes crisis monetarias y fugas de capitales: Rodrigazo (1975), Cavallazo (1982), hiperinflación (1989-1991), corralito (2002) y la crisis encadenada de Lebacs y PASO (2018-19). O bien a un shock internacional como el Coronavirus (2020). Los valles corresponden a etapas de estabilización, ingreso de capitales, eliminación de retenciones a las exportaciones y expansión del gasto público.