La economía como proceso decisorio. Mi versión
Cuando James Lipton, vicepresidente del Actor’s Studio , al director de “Cantando bajo la lluvia” le preguntó cómo se filmaba un musical, Stanley Donen contestó: “miro bailar y me pregunto; ¿dónde pongo la cámara?”. Donen indicó que la clave está en la perspectiva cual se analiza la realidad. desde la Más de 3 décadas de experiencia profesional me han convencido que eso que denominamos “la economía” se entiende mejor cuando se la enfoca desde la perspectiva de los procesos decisorios . Concretamente, cuando en vez de preguntarnos por las dotaciones físicas de recursos productivos, y tecnología en uso, nos preguntamos cómo perciben las escaseces, cómo ordenan las prioridades, cómo digieren las incertidumbres, cómo manejan las pasiones, quienes tienen que decidir (los funcionarios, los empresarios, los trabajadores, etc.). Desde esta perspectiva “la economía” no está ni en las mercaderías ni en los servicios, sino en la cabeza, el corazón, el estómago y el resto de los componentes del ser humano, que lo llevan a decidir... o a no decidir, que también es una manera de decidir. Dado que el ser humano no vive aislado sino en comunidad, en el enfoque que propongo la economía debe entenderse como un proceso decisorio concatenado . ¿Quiénes, sino los humanos a través de su accionar, generan “entre las mercaderías y servicios”, relaciones de sustitución y complementariedad? ¿Qué hay “en la esencia misma” del cine y la pizza, que implique que cuando hay entradas son complementos, y cuando no las hay son sustitutos? Y dado que algunos seres humanos cumplen el rol de funcionarios, y otros de integrantes del sector privado, la relación entre lo que “yo creo que él –o ella- cree, y ella –o él- cree que yo creo”, se espiraliza.