El futuro de la gestión de las personas
El entorno tan complejo en el que viven las organizaciones invita a los profesionales de recursos humanos a repensar su función y a reflexionar sobre algunos interrogantes como, ¿de qué manera pensar hoy la gestión del área?, ¿podemos seguir contribuyendo en las organizaciones y negocios con los modelos actuales con los que contamos?, ¿cuál es hoy el propósito y el rol de recursos humanos?, ¿cómo podríamos acompañar mejor al negocio desde la gestión de las personas para lograr los resultados esperados?, ¿cómo aportar valor a las organizaciones, pero también a las personas?
Es necesario estimular la reflexión sobre estos interrogantes en los profesionales que lideran o gestionan áreas de recursos humanos, personas, talento, cultura, capital humano; ante los nuevos desafíos, tendencias y condiciones del mundo del trabajo y las organizaciones. Con una mirada en el presente y hacia el futuro, la evolución del mercado y las empresas invitan a rediseñarnos, revisar paradigmas, creencias, modos de ser y hacer, generando nuevas propuestas que puedan aportar real valor tanto al negocio como para las personas.
Según entrevistas realizadas a ejecutivos en posiciones de gerencia general y dirección de recursos humanos a nivel local y regional, el futuro del trabajo y las organizaciones presenta grandes retos con relación a la gestión de las personas, referidos principalmente a la necesidad de desarrollar nuevas habilidades, estar atentos a las tendencias que se vienen dando en el mundo de los negocios y pensar los roles que serán necesarios crear; además de generar culturas que puedan acompañar la evolución de las estrategias.
Por otra parte, será cada vez más importante poner foco en la contribución singular que pueden aportar las personas, al combinar el uso de las tecnologías para mejorar la entrega de valor hacia el interior y el exterior de las organizaciones. Y a su vez, en la realidad actual del mundo laboral, colocar a las personas en el centro implica asegurar su bienestar. Para esto se hace necesario resignificar las nociones de espacio y tiempo de trabajo y dar respuestas a las necesidades particulares que en este contexto tienen las personas.
Como parte del futuro de recursos humanos, la creciente digitalización demanda la transformación de las actitudes mentales de los líderes y de todos los colaboradores para que realmente sea sostenible. La agilidad y la innovación aparecen como capacidades organizaciones indispensables en un entorno de complejidad que requiere soluciones creativas a medida de cada problema emergente. Mas aún, para que las nuevas habilidades puedan ponerse en práctica y se generen las capacidades enunciadas anteriormente, es preciso rediseñar las organizaciones y las formas de trabajo, con enfoques ágiles y flexibles. Esto supone revisar paradigmas tradicionales y redefinir las concepciones sobre el talento.
Sin lugar a duda, el momento actual que vive recursos humanos en las organizaciones, pone al área en una situación única para generar impacto de valor. Pero alcanzar esto supone su propio rediseño como una condición indispensable, desde una perspectiva innovadora, colaborativa y flexible. El CHRO (Chief Executive Officer), es decir el número uno de recursos humanos, debe ser un líder de negocio, mucho más que un socio. El futuro de la gestión de personas invita a los profesionales del área a repensar su propósito, y desde allí, en aprendizaje continuo, redefinir sus prácticas con doble foco: el negocio y su componente humano.