OPINIÓN. En los primeros 10 meses, el dólar oficial aumentó un 49,7% y la inflación acumulada es de 76,6%.

Cuando comenzamos el 2021, la aceleración inflacionaria de marzo, y la prespectiva de un año electoral, hizo que se comenzara a utilizar al dólar oficial como ancla nominal. El dólar oficial subió un 23,3% en todo 2021 y la inflación llegó a 50,9% anual. El 2021 fue uno de los años de mayor atraso en el tipo de cambio. Ya para 2022, el crawling-peg del BCRA se disparó tras el acuerdo con el FMI. No obstante, el fogonazo inflacionario de marzo fue tan fuerte -después potenciado tras la salida del ministro Martín Guzmán y la disparada de la brecha cambiaria- que siguió quedando “corto”. En los primeros 10 meses, el dólar oficial aumento un 49,7%, considerando el promedio mensual de octubre de 2022 (contra diciembre de 2021) y la inflación acumulada de 76,6%. En pocas palabras, el atraso cambiario se profundizó pese a la aceleración en la tasa de depreciación del peso.

Una forma de medir la magnitud del atraso, es mediante el “dólar real”. Es decir, la cotización del dólar en distintos puntos del pasado al valor presente, sumándole la inflación en nuestro país y ajustándolo con los precios (tipo de cambio e inflación) durante el mismo período de los principales socios comerciales (Estados Unidos, Europa, Brasil y China). Lo que vemos es que experimentó la segunda mayor apreciación desde al menos 1997. Y el mayor atraso, por otra parte, cambiario desde el 2008. Cayó 17,7% en términos reales en 2021 (detrás de la caída de 2008 que fue 18,8%).

En sí, el “dólar real” tuvo la mayor apreciación en años electorales desde 1997. ¿Qué sucede hoy? En lo que va de 2022, el “dólar real” se apreció otro 13,6%, en los primeros 10 meses del año. El nivel de atraso cambiario se encamina a cotizaciones de dólares muy atrasados y esto dispara las expectativas de devaluación en un contexto de incertidumbre macroeconómica. Más allá de la incertidumbre política del año electoral que se nos avecina.

Tomando una mayor perspectiva, ¿Dónde se encuentra hoy el dólar mayorista? El dólar crisis de 2002, post estallido de la Convertibilidad, que alcanzó los 4 pesos en junio de 2002, equivaldría a unos $352,4 pesos a valor actual.

El dólar más que alto que tuvimos entre 2003 y 2007 de $3 pesos promedio, ajustado por inflación a los valores de hoy, equivaldría a un dólar de $282,7 pesos. El dólar a diciembre de 2007 era de $281,9 pesos actuales, un dólar también muy competitivo. Pero en diciembre de 2011, con el cepo, el dólar ya se había atrasado fuertemente: a valores de hoy equivaldría a un dólar de $195,7 pesos. Sin embargo, hubo momentos de un dólar más que atrasado. En diciembre de 2015, el atraso era mucho mayor: el dólar oficial de entonces (9,80 pesos) equivaldría a un dólar real a valores de hoy de $133,7 pesos.

El “dólar oficial” actual está a un 14,8% por encima de ese dólar atrasado que llevaba al BCRA a perder sistemáticamente reservas. Tras la devaluación que llevó el dólar, en febrero de 2016, a 181,7 pesos a valores de hoy, se volvió a exagerar el atraso cambiario y en diciembre de 2017 (tras la elección legislativa de medio término) el dólar real, a valores de hoy, cotizaba en 154,5 pesos, sin cepo cambiario. Ese dólar de fin del 2017 está muy cerca del nivel actual y eso es una señal en términos de atraso cambiario.

Adicionalmente, el atraso del dólar (versus la inflación) se observa también en la cotización de los “dólares alternativos”. Con la apertura de la economía en la pospandemia hubo una disparada de esos dólares y el “dólar libre” llegó a $195 en octubre de 2020. Esa cotización del dólar si la traemos a precios de hoy equivale a un dólar de $560 pesos. Por otra parte, el “dólar libre” que saltó a $350 pesos tras la salida de Guzmán si le adicionamos la inflación acumulada, entre julio a octubre, nos da $425 pesos. Es tal el fogonazo inflacionario que una estabilización por algunos meses de la cotización de los “dólares alternativos” lleva a abaratar el valor del dólar billete. Actualmente el “dólar libre”, frente a los dólares de crisis de octubre de 2022 ($560) y julio pasado ($425), queda muy barato.

En síntesis, el dólar oficial, en los últimos dos años quedó atrasado. El nivel del dólar real está en puntos cercanos a dólares más que atrasados (“pisos mínimos”) que fueron seguidos, en un plazo corto, de una corrección cambiaria muy fuerte. En el caso del dólar de diciembre de 2017, a los 4 meses comenzó la corrida cambiaria de abril de 2018 (el dólar oficial pasó de $20 a fin de abril a $25 en mayo) y en el caso del dólar de noviembre de 2015, sobrevino la salida del cepo y la devaluación: aunque en ese momento el salto del dólar de $9,8 a $13,8 fue aminorado por la expectativa de un fuerte ingreso de capitales financieros.