A pesar de los avances, los desequilibrios de la macroeconomía no se han solucionado en su totalidad
OPINIÓN. Algunas mejoras reposan en cuestiones transitorias como importaciones, tarifas y tasas de interés reales negativas que deberían modificarse.
El BCRA flexibilizó el acceso al Mercado Libre de Cambios (MLC) para las MiPyMEs. A partir de ahora, podrán pagar importaciones en 30 días, y cancelar anticipadamente hasta un 20% de las compras externas de bienes de capital.
Asimismo, la entidad monetaria redujo la tasa de interés de 80% TNA a 70%, y aumentó el encaje sobre los saldos en cuentas a la vista remuneradas de fondos comunes de inversión de money market (de 0% a 10%). Además, canceló, en su totalidad, la deuda con el BIS. Estas medidas fueron la contrapartida a la evolución favorable de la coyuntura.
La reservas del Banco Central
Por su parte, desde el plano cambiario, el BCRA acumula compras netas por u$s13.398 millones en el MLC, lo que le permitió recomponer reservas. La devaluación de diciembre fue crucial como también el cronograma de pago de las importaciones.
En mayo se cancelará el 100% de las compras externas. El nivel del Tipo de Cambio Real (TCR) cayó 41% desde mediados de diciembre y, de mantenerse, podría retornar a los valores de noviembre.
El nivel actual es parecido al de la salida del cepo durante el gobierno de Cambiemos y un 20% inferior al del primer semestre de 2019. La inflación viene reflejando una clara tendencia a la baja. Marzo cerró en 11%. Más allá de esto, el realineamiento de precios relativos no terminó y el atraso del TCR puede derivar en un salto discreto (o aceleración del crawling).
Frente monetario, bonos y acciones
En el frente monetario, agregados monetarios y stock de pasivos remunerados cayeron en términos reales (la baja en las tasas de interés, de pases como plazos fijos, tuvo incidencia en ello). Al margen de esto:
- Los pasivos remunerados en pesos son casi tres bases monetarias.
- El rendimiento en pesos debería volver a ser positivo para poder salir del cepo.
- No parecería ser que el overhang de pesos se haya enmendado.
Para los bonos y acciones, lo nuevo vino de la mano de la Secretaría de Finanzas. Volvió a realizar una licitación de deuda para afrontar vencimientos por $ 0,5 billones y adjudicó $ 3 billones. Un 56% vía reapertura del bono TZXD5, ajustable por CER y con vencimiento el 15 de diciembre de 2025 (13,13%).
El resto se dividió en dos letras capitalizables con TNA de 64,16% y 67,04%. Lo relevante fue que cerca de la mitad decidió adquirir puts del BCRA. El excedente de los vencimientos de esta licitación ($2.446.836 millones) y la liquidez acumulada en el Tesoro serán utilizados oportunamente para la compra de dólares al BCRA para el pago de los vencimientos en moneda extranjera.
Los niveles de inflación en marzo marcan que la tasa sigue por encima de la tasa efectiva de política monetaria (132% vs. 101%) y muy por encima de la tasa de plazos fijos medida de forma efectiva. Los datos de abril podrían contener ese impacto, aunque el incremento vendría por lo tarifario. Los bonos CER incorporan una expectativa de inflación cercana al 147%.
Los avances en lo cambiario y monetario, así como en la estructura de precios relativos, fue importante. No obstante, los desequilibrios de la macroeconomía no se han solucionado en su totalidad.
Algunas mejoras reposan en cuestiones transitorias (importaciones, tarifas, tasas de interés reales negativas) que deberán modificarse.
(*) Federico Pablo Vacalebre es profesor de la Universidad del CEMA